Explorando museos: SAN ANTONIO DE LA FLORIDA
La Real Ermita de San Antonio de la Florida es la única de las tres dedicadas al Santo que aún perdura en la ciudad de Madrid.
A principios del siglo XX se construyó una copia junto a la original, con el fin de permitir el culto sin estropear o perjudicar los frescos originales de Francisco de Goya, sin embargo en la ermita original se celebra misa el 30 de marzo y el 16 de abril, días de nacimiento y muerte de Goya.
La congregación de los "guinderos" nació con la ermita original. Según cuenta la leyenda, un guindero camino del mercado por la Cuesta de la Vega con un asno cargado de cerezas sufrió un pequeño accidente, cayendo todas las cerezas por la cuesta. En ese momento apareció un monje que le ayudo a recoger las cerezas, pidiéndole que le llevara un puñado a San Nicolás al terminar el día. Al acercarse a la iglesia de San Nicolás -junto a la calle Mayor, la más antigua de Madrid- reconoció en un lienzo al monje que le había ayudado como San Antonio. Con este hecho nacería la Congregación de San Antonio, llamada de los Guinderos, pues su blasón lleva una guinda -y de hecho, el 13 de junio continúan ofreciendo sus guindas al santo. Por otro lado, el cuadro que había en San Nicolás de San Antonio se encuentra actualmente en la Iglesia de la Santa Cruz.
En 1720 se construye una ermita por José de Churriguera, que fue derribada en 1768 por la necesidad de construir la Carretera de Castilla . En 1770 Carlos III decidió llevar a cabo las obras de una nueva ermita, en este caso por Sabatini que, por desgracia, es derribada a los 22 años por Carlos IV.
Carlos IV se haría con el Palacio de la Florida, y es por ello que decide derribar la ermita para situar en esa zona las nuevas caballerizas del palacio, pero le encargará a Fontana la realización de una nueva ermita, que comenzaría a construirse en 1792, finalizando en 1798 -en estas obras se incluyó una cápsula del tiempo con monedas del reinado de Carlos IV junto a la primera piedra, que fue colocada por el propio monarca. Del palacio de la Florida no queda nada actualmente, pues en el siglo XIX se destruye para llevarse a cabo la Estación del Norte -actualmente, un centro comercial.
En 1798, Goya -que ya trabajaba de pintor de cámara en la corte, recibió el encargo de pintar el templo. Decidió llevar a cabo una pintura mucho más moderna que la del gusto de la época, quedando patente su característico estilo vaporoso, con una magnífica quadratura en la cúpula, quizá uno de los más hermosos ejemplos de este tipo de pintura. El ábside del altar se decora con el tema de la Trinidad mientras que la cúpula es el tema central de la ermita, con el milagro del testimonio de un hombre muerto para salvar la vida del padre de San Antonio, acusado de su homicidio.
Durante la Guerra Civil, la ermita quedó al descubierto en el Frente Universitario, y parte de los ataques afectaron aunque escasamente a la original, sufriendo más por la metralla la copia, sobre todo en los frescos de la cúpula.
A los pies del altar se encuentra enterrado Goya y su amigo y consuegro Miguel de Goicoechea.
De martes a domingo, de 9:30 a 20h.
Del 15 de junio, al 15 de septiembre, de 9:30 a 19h.
Glorieta de San Antonio de la Florida 5
Metro Principe Pio, L6-L10 y Ramal
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